¿Quedan muchas personas que deseen seguir siendo personas? ¿Quedan muchos hombres, más sensibles a la pérdida de lo que son que a la pérdida de lo que tienen? ¡Este es el gran mal que a todos nos amenaza! Todos estamos expuestos a estimar como mayor desgracia la pérdida de nuestro dinero que la pérdida de nuestra alma. Todos estamos abocados a guardarnos mejor del resfriado que amenaza nuestros bronquios que del resfriado que amenaza nuestras convicciones. Todos estamos dispuestos quizás a perder antes lo que da belleza a nuestras horas que lo que da utilidad a nuestros propósitos. Y será así, de tumbo en tumbo, de abdicación en abdicación, como llegaríamos a convertirnos en perfectos mecanismos de toma y daca, evaporada toda noble ambición.
Juan Pasquau, en Las bellas artes a la busca del hombre perdido, conferencia
pronunciada en la Escuela de Artes y Oficios de Úbeda en la apertura del
Curso Académico 1973/1974, septiembre de 1973