Porque en el fondo, la elegancia es escepticismo. Escepticismo del bueno, porque conduce directamente a la Esperanza. Lo contrario del optimismo, obtuso, de quienes creen que todo sucederá a la medida de nuestros deseos. Ese optimismo bobo conduce, al final, o a la necedad (si por casualidad vienen bien unas cuantas cosas) o al nihilismo (si luego las cosas no nos "dan la razón").
Juan Pasquau, en De la imitación del olivo, Diario Jaén, 31 de enero de 1973
No hay comentarios:
Publicar un comentario